La polémica sobre si los entrenadores personales pueden dar consejos relacionados con la nutrición es algo que no es nuevo. Si te dedicas al mundo del entrenamiento personal serás consciente de la enorme influencia que tienen los hábitos alimenticios sobre los resultados que consiguen tus clientes. El deporte y una buena alimentación van de la mano cuando lo que buscamos es una mejora en nuestra salud y condición física. No obstante, no dejan de ser disciplinas distintas en las que para adquirir conocimiento en profundidad hay que dedicar mucho tiempo y esfuerzo.
En el caso de los dietistas-nutricionistas hay que cursar una extensa formación antes de poder recetar dietas o suplementos para tratar condiciones médicas y clínicas, o diagnosticar condiciones médicas. Por lo tanto, si eres un entrenador personal y un cliente viene preguntando qué dieta debe seguir para tratar su diabetes, esto quedaría fuera de tu competencia. Resultará necesario conocer los límites que existen en relación a lo que los entrenadores personales y otros profesionales del deporte pueden decir sobre la nutrición.
Sin embargo y a pesar de las limitaciones que estamos comentando, los entrenadores personales pueden hablar con los clientes sobre lo que comen haciendo sugerencias generales sobre el tipo de comida que probablemente contribuirá a los objetivos que se planteen. Esto no quiere decir que podamos comentar lo primero que se nos venga a la cabeza. La salud de nuestros clientes debe ser siempre nuestra prioridad, por lo tanto es necesario adquirir unos conocimientos sobre nutrición que nos permitan dar un consejo profesional y que nos ayuden a cumplir con el cometido de nuestro trabajo.
Hay varios puntos básicos sobre la nutrición que debes conocer para poder dar un buen asesoramiento. Tener una buena formación sobre nutrición será una garantía de cara a obtener los resultados que se buscan en los planes de entrenamiento. A continuación compartimos algunos de estos puntos clave:
Índice de contenido
FISIOLOGÍA EN EL ENTRENAMIENTO
Es fundamental conocer cómo influye cada tipo de actividad deportiva en el gasto calórico de cada persona, qué sistemas energéticos están presentes y cómo influye la alimentación en cada uno de ellos. No sólo es una cuestión de cuántas calorías se consumen, sino también de cómo se produce esa demanda de energía por parte del cuerpo. No será igual por ejemplo un ejercicio de resistencia como lo es correr una maratón a un ejercicio explosivo como lo es el levantamiento de peso.
REQUISITOS PARA EL BALANCE EN LA DIETA
Para mantener el equilibro en cualquier dieta es imprescindible que se mantenga el balance entre los macronutrientes y micronutrientes. Si se da algún tipo de desequilibrio, produciendo por ejemplo un déficit de vitaminas, esto podría derivar en un peor rendimiento o incluso en ciertas enfermedades.
LIMITAR Y CALCULAR EL CONSUMO DE CALORÍAS
Con la orientación adecuada y un plan de dieta equilibrado, es posible mantener el número de calorías bajo control y no causar ningún daño en el proceso. A la hora de perder, ganar o mantener peso, el primer paso que damos es calcular las calorías que pueden ayudar a lograr ese objetivo. En múltiples ocasiones no se le da importancia a este apartado en referencia a las calorías y alimentos ingeridos repercutiendo de menera diferente en nuestros objetivos.
Los cálculos de calorías son una estimación aproximada y, por lo tanto, sólo deben considerarse como puntos de partida. No se pueden tomar decisiones drásticas en base exclusivamente al consumo de calorías pues podríamos acabar aplicando dietas que afecten a la salud de nuestros clientes.
NIVELES DE HIDRATACIÓN
Mantenerse hidratado no solo es eficaz para un buen estado de salud, sino que también ayuda a perder peso.
Cuando los niveles de ingesta de agua son bajos, los riñones no funcionan trabajando de forma regular. Para asumir las funciones de unos riñones con baja actividad, el hígado se hace cargo, abandonando tareas como la de quemar grasa para obtener energía. Éste es tan sólo uno de los ejemplos del impacto que tiene una mala hidratación en el cuerpo.
Actualmente en España para ser nutricionista o dietista hay que cursar estudios reglados. Como ya comentábamos, sin este tipo de formación no se ejercer de forma profesional. Para trabajar como nutricionista hay que cursar el Grado en nutrición y dietética que tiene una duración de cuatro años. En el caso de los dietistas es necesario un ciclo formativo de grado superior en dietética. El ciclo tiene una duración de dos años y de 2000 horas lectivas.
Aunque no haya una certificación en particular que sea necesaria para hablar sobre nutrición como entrenador personal, es mejor buscar un curso de formación riguroso y respetado que cubra los fundamentos de la nutrición y la fisiología.
Como entrenador personal, si tienes los conocimientos y la formación adecuada sobre nutrición puedes hablar con clientes sin problema sobre comer, moverse y llevar unos hábitos saludables. Algunos ejemplos podrían ser los siguientes:
- Animar a los clientes a comer proteínas y verduras ricas en nutrientes.
- Educar a los clientes sobre los beneficios de las proteínas, las grasas saludables y otros macronutrientes.
- Ofrecer recetas o dar consejos sobre cómo preparar un menú equilibrado.
- Informar sobre los principios de una buena nutrición y brindar orientación basada en el comportamiento para mejorar los hábitos alimenticios.
- Ayudar a elegir los alimentos adecuados para comer antes y después de los entrenamientos.
- Compartir recursos de organizaciones de nutrición reconocidas.
- Presentar información nutricional de una manera accesible y contrastada que tenga sentido para los clientes.
Como puedes ver, no estás diagnosticando problemas de salud ni prescribiendo planes nutricionales para tratar enfermedades o sus síntomas. Simplemente se trata de brindar conocimiento y ayuda profesional y combinarlo con los planes de ejercicio para obtener mejores resultados.
Lógicamente tendremos que saber dónde están los límites de nuestra profesión y reconocer cuándo es necesario el consejo de un nutricionista, pero tener unos conocimientos sólidos sobre nutrición siendo entrenador personal es algo sumamente beneficioso, tanto para nuestros clientes como para nosotros mismos.
Aprender los conceptos básicos de la nutrición puede aportar importantes beneficios tanto a tu profesión como a la del cliente. Comienza con estos conceptos básicos y luego profundiza con un curso de entrenamiento personalizado o nutrición deportiva.